Senda fluvial del río Alberche (Carnaval de Navalosa)

Al celebrarse este domingo el Carnaval de Navalosa planteamos esta excursión en la que combinaremos una marcha a pie por la mañana, con la asistencia a este interesantísimo y ancestral carnaval.

Marco Geográfico
Esta ruta se desarrolla por los términos municipales de Navalosa, entre las sierras de la Paramera y Gredos Oriental, en la provincia de Ávila.
Descripción del itinerario
Comenzaremos el itinerario en la población de Navalosa, tomando un camino vecinal que desciende hacia el río Alberche. Nada más salir del pueblo nos topamos con uno de los atractivos de esta ruta, una antigua era para trillar el trigo y los Corrales, de planta cuadrada u ovalada, tejado soportado por vigas de madera y techo de piornos, muy similares en su estructura y aspecto a las pallozas de los Ancares, de Asturias o de Galicia. Seguimos por la senda hasta alcanzar el collado de Cerro Pelado, donde disfrutaremos de unas increíbles panorámicas del Almanzor y la Galana, en el circo de Gredos.
A partir de aquí comenzaremos el descenso hacia el río Alberche, el cual cruzaremos por los Trancos, pasaderas de piedra que nos ayudarán a vadear el río. Continuaremos por la orilla derecha del río hasta llegar a otras pasaderas, para cruzar de nuevo a la orilla izquierda del río. Proseguimos por la senda fluvial unos kilometros y a continuación afrontamos un pequeño ascenso que nos llevará hasta los Prados de la Cerca, donde nos encontraremos más Corrales.
Cruzaremos la carretera, y avanzaremos por un robledal con ejemplares importantes, mientras disfrutamos de las vistas del cañón del Alberche. A continuación abandonamos la senda del robledal y salimos a la carretera de Navalosa donde finalizaremos nuestro recorrido y nos recogerá el autocar.
Valores culturales
La fiesta de Los Cucurrumachos y carnaval de Navalosa, es uno de los más interesantes y singulares de los que se realizan en la provincia abulense. En la tarde del “domingo gordo” los quintos y quintas se visten con sus mejores galas serranas, ellos con trajes de paño, pañuelos bordados, bastones con cintas de colores, sombreros negros con escarapelas, y pequeñas esquilas, ellas con enaguas blancas, falda con mandil bordado, blusa blanca, mantón o pañuelo sobre los hombros, guantes blancos y zapatos negros. Al sonido de dulzaina y tamboril comienzan los bailes en corros, por una parte los quintos y quintas, por otro las madres.
También se congregan en la plaza personajes con aspecto aterrador: voluminosos, cubiertos por mantas de rayas, tejidas con tiras de trapos (“pingueras”), la cabeza cubierta por una máscara de madera, con crines de caballo o burro, pieles de animales coronadas por cornamentas de cabra o vaca, guantes y algunos con bastones adornados con calaveras de animales. Llevan decenas de cencerros atados a la cintura y la espalda que hacen sonar con sus movimientos exagerados. Con aspecto amenazador, parecen representar algunos trabajos ganaderos o agrícolas; ocasionalmente, sacan paja de sus alforjas o sacos y la arrojan sobre la gente.
La fiesta continúa alternando coplas, bailes e incluso un par de disparos al aire que supuestamente fulminan a uno de los personajes, “el vaquilla”. Siguen la música, carreras, invitaciones y alegría. El vaquilla resucita y los cucurrumachos se despojan de sus disfraces.
Además, el municipio de Navalosa se encuentran unos increíbles corrales, muy similares en su estructura y aspecto a las pallozas de los Ancares, de Asturias o de Galicia, pero separadas cientos de kilómetros de ellas, son un valor cultural y etnográfico que debería ser mantenido con tantos esfuerzos como fueran precisos. Están edificados con planta cuadrada u ovalada, tejado soportado por vigas de madera y techo de piornos. En la planta superior tienen un acceso independiente para meter el heno y los materiales que necesitaran para los pequeños cultivos o para la atención del ganado. En la parte inferior se recogía el ganado.
Existen unos 200 corrales en el término, la mayoría de ellos en ruina o en proceso de ruina, con sus vigas de madera rotas y sus tejados de piornos hundidos, sin contar con las construcciones que se han edificado o improvisado sobre sus paredes, reconocibles por su planta elíptica.
Valores naturales
El río Alberche recibe sus primeras aguas de las sierras de Villafranca y Paramera, al Norte, y de la sierra de Gredos, al sur. El primer embalse en el que se remansa es de del Burguillo. Hasta ahí el río conserva gran parte de su belleza intacta, pues escasos son los núcleos de población que se ubican en su cuenca.
Dificultad de la ruta
Media. El trazado es sencillo y propio de un nivel 1.
Equipo recomendado
Chaqueta impermeable, forro polar, botas de montaña; mochila con comida y agua (1,5 litros mínimo); guantes, botiquín personal, protector solar, cubremochilas, paraguas plegable, bastones.
Es recomendable llevar un pequeño bolso de mano con ropa de repuesto que se deja en el maletero del autocar. De esta forma, al regresar puede uno cambiarse, si por la razón que fuera se hubiese uno mojado (o no).
Por otra parte, y con el fin de no ensuciar el autocar, se ruega se lleve calzado de respuesto que se dejará en el maletero, quitándose las botas antes de subir al autocar.
Por razones de seguridad, los bastones se transportarán necesariamente en el maletero del autocar.